Especificaciones y análisis del Volkswagen Golf
Potencia
116CV
Par
165Nm
Consumo
9.1l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
12.3s
Vel. Máx.
189km/h
Peso
1215kg
Precio
27,780€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 4v
FWD
4 / 2 puertas
270 L
55 L
85 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Volkswagen Golf Cabrio Highline 2.0 115 CV Automático (2000-2002)
Descripción general
El Volkswagen Golf Cabrio Highline de 1997, con su motor 2.0 de 115 CV y transmisión automática, es un clásico que evoca la libertad y el estilo de una época. Este descapotable, con su diseño atemporal, invita a disfrutar de la carretera con el viento en el cabello, ofreciendo una experiencia de conducción relajada y placentera.
Experiencia de conducción
Conducir este Golf Cabrio es sumergirse en una experiencia de antaño. La transmisión automática de 4 velocidades, aunque no es la más rápida, proporciona una marcha suave y sin sobresaltos, ideal para paseos tranquilos. El motor de 115 CV, sin ser un prodigio de potencia, cumple con creces para un uso diario y escapadas de fin de semana, permitiendo alcanzar los 189 km/h y acelerar de 0 a 100 km/h en 12.3 segundos. La suspensión, tipo McPherson delante y de rueda tirada con elemento torsional detrás, ofrece un buen equilibrio entre confort y estabilidad, absorbiendo las irregularidades del camino con dignidad. La dirección de cremallera, aunque carece de la precisión de sistemas más modernos, transmite una sensación de control adecuada para su segmento y época. Es un coche para disfrutar del viaje, no para buscar récords en circuito.
Diseño y estética
El diseño del Golf Cabrio de 1997 es un icono. Sus líneas suaves y redondeadas, junto con la capota de lona, le confieren una elegancia atemporal. La versión Highline añade detalles que realzan su atractivo, como las llantas de 15 pulgadas con neumáticos 195/50 R15 V. Con una longitud de 4081 mm, una anchura de 1695 mm y una altura de 1425 mm, sus proporciones son equilibradas y armoniosas. El interior, aunque sobrio, es funcional y está bien rematado, con capacidad para cuatro ocupantes. El maletero de 270 litros es suficiente para el equipaje de una escapada. Es un coche que, a pesar de los años, sigue girando cabezas y transmitiendo una sensación de estilo y distinción.
Tecnología y características
En 1997, la tecnología del Golf Cabrio Highline era la esperada para un vehículo de su categoría. El motor de gasolina de 1984 cc, con inyección indirecta y 2 válvulas por cilindro, ofrecía una fiabilidad contrastada. La transmisión automática de 4 velocidades era una comodidad apreciada en su momento. En cuanto a seguridad, contaba con frenos de disco ventilados de 256 mm delante y discos de 226 mm detrás, proporcionando una capacidad de frenado adecuada. La dirección asistida, aunque no se especifica su tipo, era un elemento de confort importante. No esperemos sistemas de asistencia a la conducción modernos, pero sí una ingeniería sólida y probada que ha resistido el paso del tiempo.
Competencia
En su época, el Volkswagen Golf Cabrio Highline competía con otros descapotables compactos como el Opel Astra Cabrio, el Ford Escort Cabrio o el BMW Serie 3 Cabrio (E36). Cada uno ofrecía su propia interpretación del placer de conducir a cielo abierto, pero el Golf se destacaba por su equilibrio entre diseño, fiabilidad y un toque de exclusividad que lo hacía muy deseado.
Conclusión
El Volkswagen Golf Cabrio Highline 2.0 de 1997 es más que un coche; es una declaración de intenciones. Es la elección perfecta para aquellos que buscan un clásico con encanto, capaz de ofrecer una experiencia de conducción relajada y placentera. Su diseño atemporal, su motor fiable y su capacidad para transformar cualquier trayecto en una aventura a cielo abierto lo convierten en un vehículo con un alma especial. Es un coche para disfrutar, para coleccionar recuerdos y para sentir la libertad en cada kilómetro. Un verdadero icono que sigue enamorando.




