Especificaciones y análisis del Volkswagen Lupo
Potencia
60CV
Par
116Nm
Consumo
6.2l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
14.3s
Vel. Máx.
160km/h
Peso
912kg
Precio
11,000€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
4 / 3 puertas
130 L
34 L
44 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Volkswagen Lupo 60 Conceptline · 60 CV (2001-2004)
Descripción general
El Volkswagen Lupo 60 Conceptline de 1999 es un pequeño utilitario que, a pesar de su tamaño compacto, prometía la calidad y robustez inherentes a la marca alemana. Diseñado para la ciudad, este modelo buscaba ofrecer una solución de movilidad ágil y eficiente en un paquete atractivo y funcional. Su llegada al mercado representó la apuesta de Volkswagen por el segmento de los coches urbanos, buscando conquistar a un público que valoraba la practicidad sin renunciar a un cierto nivel de equipamiento y confort.
Experiencia de conducción
Al volante del Lupo 60 Conceptline, la sensación predominante es la de agilidad. Sus 60 CV, extraídos de un motor de gasolina de 1.4 litros, son suficientes para mover con soltura sus 912 kg en el entorno urbano. La dirección, aunque no es un prodigio de comunicación, cumple su función, permitiendo maniobrar con facilidad en espacios reducidos. En carretera, su comportamiento es predecible, aunque las recuperaciones pueden ser algo lentas, invitando a planificar los adelantamientos. La suspensión, de tipo McPherson delante y rueda tirada con elemento torsional detrás, ofrece un equilibrio razonable entre confort y estabilidad, absorbiendo las irregularidades del asfalto sin excesiva brusquedad. El consumo combinado de 6.2 l/100km lo convierte en un compañero económico para el día a día.
Diseño y estética
El diseño del Volkswagen Lupo es inconfundiblemente Volkswagen, con líneas limpias y una estética funcional. Su carrocería de 3 puertas y sus dimensiones compactas (3527 mm de largo, 1639 mm de ancho y 1460 mm de alto) lo hacen ideal para la ciudad. El frontal presenta los faros característicos de la época, mientras que la zaga es sencilla y práctica. A pesar de su tamaño, el interior está bien aprovechado, ofreciendo cuatro plazas y un maletero de 130 litros, suficiente para la compra semanal o una escapada corta. La versión Conceptline, aunque básica, mantenía la sobriedad y la calidad de acabados esperada en un Volkswagen.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Lupo 60 Conceptline de 1999 se presentaba con lo esencial para la época. Su motor de gasolina de 1.4 litros con inyección indirecta y 4 cilindros en línea, fabricado en aluminio tanto en el bloque como en la culata, ofrecía una potencia de 60 CV a 4700 rpm y un par motor de 116 Nm a 3000 rpm. La transmisión manual de 5 velocidades enviaba la potencia a las ruedas delanteras. En cuanto a seguridad, contaba con frenos de disco ventilados de 239 mm en el eje delantero y tambores de 200 mm en el trasero. La dirección de cremallera, aunque sin asistencia variable, contribuía a la facilidad de manejo en ciudad. No incorporaba sistemas avanzados de asistencia a la conducción, algo común en vehículos de su segmento y época.
Competencia
En el competitivo segmento de los utilitarios, el Volkswagen Lupo 60 Conceptline se enfrentaba a duros rivales como el Fiat Seicento, el Ford Ka y el Opel Agila. Cada uno de ellos ofrecía sus propias ventajas, ya fuera en precio, espacio interior o equipamiento. El Lupo se diferenciaba por su imagen de marca, su calidad de construcción percibida y un comportamiento dinámico que, sin ser deportivo, transmitía solidez y seguridad, características muy valoradas por los compradores de Volkswagen.
Conclusión
El Volkswagen Lupo 60 Conceptline de 1999 fue un coche que cumplió con su cometido: ofrecer una solución de movilidad urbana compacta, eficiente y con la calidad de Volkswagen. Aunque no destacaba por su potencia o equipamiento de lujo, su fiabilidad, bajo consumo y facilidad de manejo lo convirtieron en una opción atractiva para aquellos que buscaban un coche práctico y duradero para el día a día. Su diseño atemporal y su buen hacer mecánico le permitieron mantener su atractivo a lo largo de los años, siendo un digno representante de la filosofía de la marca.




