Especificaciones y análisis del Volkswagen Passat
Potencia
177CV
Par
380Nm
Consumo
5.2l/100
Emisiones
136g/km
0-100 km/h
8.6s
Vel. Máx.
220km/h
Peso
1580kg
Precio
38,985€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 6v
FWD
5 / 5 puertas
603 L
70 L
130 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Volkswagen Passat Variant R-Line 2.0 TDI 177 CV DSG6 BlueMotion Technology (2012-2014)
Descripción general
El Volkswagen Passat Variant R-Line 2.0 TDI de 177 CV con cambio DSG6 y tecnología BlueMotion, lanzado entre 2012 y 2014, representa la perfecta fusión entre la funcionalidad de un familiar y el dinamismo de un deportivo. Con un precio de 38.985 €, este modelo se posicionó como una opción atractiva para quienes buscaban un coche versátil, eficiente y con un toque de exclusividad. Su motor diésel de 177 CV, combinado con la suavidad del cambio automático de doble embrague, prometía una experiencia de conducción equilibrada y placentera, ideal tanto para el día a día como para largos viajes.
Experiencia de conducción
Al volante del Passat Variant R-Line, la sensación de control y aplomo es inmediata. El motor 2.0 TDI de 177 CV entrega su potencia de forma lineal y contundente, con un par motor de 380 Nm disponible desde bajas revoluciones que garantiza recuperaciones ágiles y adelantamientos seguros. La caja de cambios DSG de 6 velocidades, con sus transiciones rápidas y casi imperceptibles, contribuye a una experiencia de conducción fluida y sin sobresaltos. La suspensión, aunque firme por el acabado R-Line, filtra eficazmente las irregularidades del terreno, ofreciendo un buen compromiso entre confort y dinamismo. La dirección asistida eléctrica, sensible a la velocidad, proporciona una retroalimentación precisa, invitando a disfrutar de cada curva. Es un coche que transmite confianza y seguridad, capaz de devorar kilómetros con una facilidad asombrosa, manteniendo a sus ocupantes cómodos y relajados.
Diseño y estética
El diseño del Passat Variant R-Line de 2011 es una declaración de intenciones. La carrocería familiar se realza con los elementos distintivos del paquete R-Line, que le otorgan una imagen más deportiva y sofisticada. Las llantas de 17 pulgadas con neumáticos 235/45 R17, los paragolpes específicos y los detalles cromados confieren al conjunto una presencia imponente y elegante. A pesar de sus 4.771 mm de longitud, el diseño es armonioso y equilibrado, sin caer en estridencias. El interior, fiel al estilo Volkswagen, destaca por su sobriedad, la calidad de los materiales y la ergonomía de sus mandos. Los asientos deportivos R-Line, además de ofrecer una excelente sujeción, añaden un toque de exclusividad al habitáculo. La amplitud es una de sus grandes bazas, con un maletero de 603 litros que lo convierte en un compañero ideal para familias y amantes de las actividades al aire libre.
Tecnología y características
Este Passat Variant R-Line incorporaba una tecnología avanzada para su época, orientada a mejorar la eficiencia, el confort y la seguridad. El motor 2.0 TDI, con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, junto con el sistema Stop&Start, optimizaba el consumo de combustible y reducía las emisiones. La caja de cambios DSG de doble embrague era un referente en suavidad y rapidez. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delante y macizos detrás, control de estabilidad y tracción, y múltiples airbags. La dirección asistida eléctrica, sensible a la velocidad, mejoraba la maniobrabilidad y la precisión en carretera. Aunque no disponía de las últimas ayudas a la conducción de los modelos actuales, su equipamiento tecnológico era completo y funcional, pensado para hacer la vida a bordo más fácil y segura.
Competencia
En el segmento de los familiares diésel de potencia media-alta, el Volkswagen Passat Variant R-Line se enfrentaba a duros competidores. Entre ellos destacaban el Audi A4 Avant, con un enfoque más premium y deportivo; el BMW Serie 3 Touring, conocido por su dinamismo y tracción trasera; el Mercedes-Benz Clase C Estate, que ofrecía un mayor confort y lujo; y el Ford Mondeo Sportbreak, que apostaba por una excelente relación calidad-precio y un comportamiento dinámico notable. Otros rivales a considerar eran el Opel Insignia Sports Tourer y el Peugeot 508 SW, que ofrecían alternativas interesantes en diseño y equipamiento. El Passat Variant R-Line se diferenciaba por su equilibrio general, su calidad de construcción, su amplitud interior y la eficiencia de su motor TDI con cambio DSG.
Conclusión
El Volkswagen Passat Variant R-Line 2.0 TDI de 177 CV DSG6 BlueMotion Technology es un coche que, a pesar de los años, sigue siendo una opción muy interesante en el mercado de segunda mano. Su combinación de un motor potente y eficiente, una caja de cambios suave y rápida, un diseño atractivo y un interior espacioso y bien rematado lo convierten en un familiar muy completo. Es un coche ideal para quienes buscan un vehículo versátil, capaz de afrontar largos viajes con comodidad y seguridad, sin renunciar a un toque de deportividad. Su fiabilidad mecánica, característica de Volkswagen, es un punto a favor, aunque como cualquier coche usado, requerirá un mantenimiento adecuado para seguir ofreciendo lo mejor de sí mismo. En definitiva, un coche que cumple con creces las expectativas de un público exigente.




