Volkswagen Scirocco Typhoon 2.0 TDI 150 CV BMT DSG (2016-2018)

2014
Gasóleo
FWD
Automático 6v
Volkswagen Scirocco - Vista 1
Volkswagen Scirocco - Vista 2
Volkswagen Scirocco - Vista 3
Volkswagen Scirocco - Vista 4

Especificaciones y análisis del Volkswagen Scirocco

Potencia

150CV

Par

320Nm

Consumo

4.5l/100

Emisiones

119g/km

0-100 km/h

8.6s

Vel. Máx.

213km/h

Peso

1395kg

Precio

30,795

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Automático 6v

Tracción

FWD

Plazas

4 / 3 puertas

Maletero

312 L

Depósito

55 L

Potencia

110 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima150 CV / 110 kW
Par máximo320 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónAutomático 6v

Capacidades

Depósito55 L
Maletero312 L

Análisis detallado del Volkswagen Scirocco Typhoon 2.0 TDI 150 CV BMT DSG (2016-2018)

Descripción general

El Volkswagen Scirocco Typhoon 2.0 TDI de 150 CV con cambio DSG, fabricado entre 2016 y 2018, es un coupé que combina la deportividad de sus líneas con la eficiencia de un motor diésel. Este modelo, con su distintivo diseño de tres puertas, se posiciona como una opción atractiva para quienes buscan un coche con carácter y un toque de exclusividad dentro de la gama Volkswagen.

Experiencia de conducción

Al volante del Scirocco Typhoon, la sensación es de control y agilidad. El motor 2.0 TDI de 150 CV, aunque diésel, ofrece una respuesta enérgica y un par motor de 320 Nm desde bajas revoluciones, lo que se traduce en una aceleración de 0 a 100 km/h en 8.6 segundos y una velocidad máxima de 213 km/h. La transmisión automática DSG de 6 velocidades, con sus rápidos y suaves cambios, contribuye a una experiencia de conducción dinámica y placentera. La suspensión, tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, junto con los neumáticos 235/40 R18, proporciona un buen equilibrio entre confort y firmeza, permitiendo disfrutar de las curvas con confianza. La dirección asistida eléctrica, sensible a la velocidad, ofrece una buena retroalimentación y precisión.

Diseño y estética

El diseño del Volkswagen Scirocco Typhoon es, sin duda, uno de sus puntos más fuertes. Su silueta coupé, baja y ancha, le confiere una presencia deportiva y distintiva. Las tres puertas acentúan su carácter dinámico, mientras que los detalles específicos de la versión Typhoon realzan su atractivo. Las líneas fluidas y el techo descendente hacia la zaga le otorgan una estética atemporal que sigue siendo atractiva hoy en día. El interior, aunque con un diseño más sobrio y funcional, está bien rematado y ofrece una buena ergonomía, con asientos deportivos que recogen bien el cuerpo.

Tecnología y características

En cuanto a tecnología, el Scirocco Typhoon incorpora elementos que mejoran la experiencia de conducción y la seguridad. El motor 2.0 TDI cuenta con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, lo que optimiza su rendimiento y eficiencia. La función Start/Stop contribuye a reducir el consumo y las emisiones. La transmisión DSG de doble embrague es un referente en el segmento por su rapidez y suavidad. En el apartado de seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, así como un chasis bien equilibrado. Aunque no es un coche de última generación, su tecnología es sólida y probada.

Competencia

El Volkswagen Scirocco Typhoon compite en un segmento de coupés compactos con un enfoque deportivo. Entre sus principales rivales se encuentran modelos como el Audi TT, el Peugeot RCZ o incluso versiones más deportivas de compactos como el BMW Serie 1 Coupé. Frente a ellos, el Scirocco ofrece una combinación de diseño distintivo, un motor diésel eficiente y un comportamiento dinámico a un precio competitivo, lo que lo convierte en una alternativa interesante para quienes buscan un coche con personalidad sin renunciar a la practicidad de un motor diésel.

Conclusión

El Volkswagen Scirocco Typhoon 2.0 TDI de 150 CV DSG es un coche que enamora por su diseño y convence por su comportamiento. Es una opción ideal para aquellos que buscan un coupé con un toque deportivo, pero que a la vez necesitan la eficiencia y el bajo consumo de un motor diésel. Su estética atemporal, unida a un motor solvente y una transmisión excelente, lo convierten en un coche divertido de conducir y con un atractivo innegable. Es un vehículo que, a pesar de los años, sigue manteniendo su esencia y su capacidad para arrancar sonrisas en cada trayecto.